Poema para Alejandra Pizarnik
Para Flora Alejandra Pizarnik. Poetisa argentina. Su obra poética, abarca la corriente neosurrealista y ha sido a través del tiempo mi mayor inspiración a la hora de escribir.
En humo de tus cigarros envuelto,
percibiendo tu silencio,
tu raro acento,
tu desenfrenada sexualidad,
en un desconocido Bueno Aires.
Admirando tus hermosas amapolas,
en tus labios
saboreo desdicha y aniquilamiento,
en un París sin luces,
abandonado en tus escritos me deletreo
en cada poema,
me percibo,
te fuiste en Seconal,
en mi pecho por siempre inmortal.
Sombría encrucijada
Callejón deshecho y destruido.
Perros y gallos echados al viento
politeístas y vagabundos rondan el bazar
caminando indiferentemente,
en zig zag
al otro lado del mundo se habla de Guerra
no importa qué lado del mundo habites.
Aquí siempre ha habido más muertos,
de los que se pueden con las manos contar.
Me callo, me enfoco y escribo
indiferencia y amargura sin parar.
La única luz en el cielo, es lunar
apesta por doquier a pulque y cebada
después del sismo
hogares a punto de desplomar
vibración y desconcierto
al paso de aviones y del viejo tren
oscuridad incierta oxidada
despierto con seca boca y
comezón en las falanges,
se despeja mi mente
y todo vuelve a comenzar.
Ícaro
En el borde del vaso brinqué, cuando la luna cedió,
cuando los naranjos callaron y todo apestaba a lavanda
estrellas muriendo y a su vez sonriendo.
Innatas melodías me arrullan, retorcido humo abunda,
escondí el oscuro secreto evidente,
y para siempre callé, abandonado a mi suerte,
espero la medianoche sonrisa en vidas que me rodean
observo y en mi familia me refugio
embriagante sangre pura destilan, soy ellos
y a su vez, sin ellos nada. . .
Dulce capullo quebrado, despliega tus alas al sol ardiente.